CON LOS OJOS ABIERTOS

"El límite de mi mirada es el límite de mi mundo". Críticas, crónicas de festivales, programación de cineclubes y apuntes sobre cine.

sábado, marzo 25, 2006

CINECLUB CON LOS OJOS ABIERTOS EN LA CUMBRE

PROGRAMACIÓN ABRIL Y MAYO 2006
SALA LUIS BERTI, BELGRANO 470


Dice Godard en una entrevista al inicio del milenio en curso: “Creo que el cine es una imagen del mundo. Si se sabe observarla, se aprenden infinidad de cosas. Es la proyección del mundo en un momento dado. Si se estudiara la materia de la que está compuesta una película, esas treinta personas que se reúnen y se separan, las relaciones de dinero, sociales, sexuales, se verían muchas cosas”. Como programador sigo al pie de la letra este juicio de Godard, y busco para ello un conjunto de películas diversas que puedan alentar un aprendizaje concreto, sin eclipsar el placer propio del arte cinematográfico, aunque sí eludiendo la concepción cínica y cobarde de entender el cine como mero entretenimiento. Usted puede divertirse, emocionarse, asombrarse como espectador, pero, fundamentalmente, puede edificarse. Es decir, comprobar que ciertas películas pueden cambiar y renovar algo de vuestra identidad. Sí, el cine es cultura, y la cultura no es caviar simbólico para elegidos. En efecto, la cultura (y el cine) como un derecho disponible para cualquier sujeto que pretenda superar sus limitaciones y prejuicios en aras de una vida enriquecida. Para eso debería servir un cineclub. Veremos si podré o no sostener dicho objetivo. La invitación es clara y extensiva a todo miembro de esta comunidad. Las películas esperan ser vistas.
Roger Alan Koza, programador


Miércoles 5 de abril a las 20.30hs:
El cielo gira, de Mercedes Álvarez, España, 2004.
106 minutos / Apta para todo público.
Sección: Preestreno / El ojo lúcido (documentales)
* No hay variedades para esta función

En una combinación perfecta entre El sol del membrillo de Érice y En construcción de Guerín, El cielo gira de Mercedes Álvarez, ganadora indiscutible de la séptima edición del BAFICI, pertenece a una tradición minoritaria del cine español, específicamente, la de Érice y Guerín, una que entiende al cine como ejercicio contemplativo capaz de capturar lo extraordinario en la vida ordinaria. Álvarez regresa a su pueblo natal, Aldeaseñor, un páramo casi fantasma. Allí viven 14 personas. Parece la nada, el fin del tiempo. Y sin embargo, mientras que los moradores discuten sobre los misterios de su universo, unos aviones ultrasónicos cruzan el cielo rumbo a Irak. El mundo es uno. (RK)


Miércoles 12 de abril a las 20.30hs:
Mi verano de amor, de Pawel Pawlkovski, Reino Unido, 2005.
87 minutos / No recomendada para menores de 16 años.
Sección: Preestreno
Variedades: a las 20.10hs: El frigorífico, de Peter Mullan, Escocia, 1996

Esta bellísima e inteligente película ha sido vendida como la versión inglesa y feminista de El secreto de la montaña. Quizás. No se trata del amor entre cowboys sino entre dos mujeres jóvenes en un medio rural inglés en donde la vida social está regulada por una ética conservadora y una existencia anodina. Pero el film del polaco Pawlkovski es en verdad otra cosa: un estudio minucioso de cómo se obtiene la maduración psíquica y la autoestima en el complejo pasaje de la adolescencia a la vida adulta, y cómo ello no es ajeno a la pertenencia de clase. (RK)


Miércoles 19 de abril a las 20.30hs:
Escenas frente al mar, de Takeshi Kitano, Japón, 1991.
96 minutos / Apta para todo público.
Sección: Retrospectiva mínima de Takeshi Kitano.
Variedades: a las 20.10hs: El hombre sin cabeza, de Juan Solanas, Francia, 2004.

Primera obra maestra del director de Flores de fuego en el que todas sus obsesiones temáticas y formales pueden reconocerse en la mínima aunque conmovedora historia de un recolector de basura cuya vida cambiará al encontrar una tabla de surf entre los escombros. Como en muchas películas del director el mar constituye un paisaje espiritual y lírico en donde los personajes buscan sosiego y reparo. Kitano suele concebir el amor en su costado trágico, y Escenas frente al mar no es una excepción; sin embargo, el sentimiento dominante que sobrevuela el relato más que infausto es nostálgico. (RK)


Miércoles 26 de abril a las 20.30hs:
El hombre oso, de Werner Herzog, Alemania-EE.UU., 2005.
104 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Sección: El ojo lúcido (documentales)
Variedades: a las 20.20hs: El percusionista del bolero, Patrick Laconte, Francia, 1992.

Que Herzog es uno de los maestros indiscutibles del medio, es incuestionable. Que el director de Aguirre, la ira de Dios es además un gran documentalista, es también incuestionable. El hombro oso es un film típico y atípico. Típico porque el personaje central de este documental, Timothy Treadwell, bien podría haber sido un descendiente lunático de Klaus Kinski. Este conservacionista independiente y educador amateur, alguna vez alcohólico y depresivo, vivió durante los últimos quince veranos de su vida en compañía de osos salvajes en una reserva de Alaska. Atípico porque una gran parte de las imágenes de El hombre oso provienen del material audiovisual filmado por el propio Treadwell en sus expediciones solitarias, un recurso que Herzog no suele utilizar en sus documentales, aunque su inteligencia (y su ética) se verifica en aquello que decide mostrar y no mostrar respecto de lo “rodado” por Treadwell. Herzog fascinado por este hombre al que considera un extraño colega suyo, ofrece una meditación extraordinaria sobre los límites de la razón y la civilización, y la interacción impredecible entre la naturaleza y los hombres. Treadwell es curiosamente un alter ego del realizador, aunque sus concepciones respecto de la naturaleza de la naturaleza sean esencialmente opuestas. (RK)


Miércoles 3 de mayo a las 20.30hs:
Nadie sabe, de Kore-eda Hirokazu, Japón, 2004.
140 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Sección: Preestreno
Variedades: a las 19.40hs: La sesión musical de El hombre oso, Alemania-EE.UU., 2005.

Basada en “El caso de los cuatro niños abandonados de Nishi Sugamo”, el cuarto largometraje de Kore-eda es un estudio analítico y conmovedor de la infancia, y del lugar o no que los adultos tienen en ella. ¿Qué pasaría si se creciera sin adultos? De esta pregunta se predica el nudo narrativo de Nadie sabe, al menos cuando la madre de los niños sin muchas explicaciones no regresa un día al hogar. Kore-eda ofrece también un retrato de la ciudad de Tokio como un espacio urbano destinado a la invisibilidad y la indiferencia, muy bien establecido entre los planos generales de la ciudad en constraste con los planos detalles de los niños, dentro y fuera de la casa. No sorprende que Yagira Yuuya, quien interpreta al mayor de los hermanos, haya ganado en Cannes 2004 el premio a mejor actor, pues todas las interpretaciones son superlativas, a tal punto que uno puede olvidar que entre lo que se ve y quien esta mirando hay una cámara de por medio. (RK)

Miércoles 10 de mayo a las 20.30hs:
Presidente Mitterrand, de Robert Guédiguian, Francia, 2005.
Duración: 113 minutos / Apta para todo público.
Sección: El cine que no vemos, el cine que no se estrena.
Variedades: a las 20.15hs: Conciertos de peticiones, de Krzysztof Kieloswski, Polonia, 1959.
Guédiguian deja por una vez Marsella y su clase trabajadora para ofrecer un retrato sobre los últimos días del presidente Mitterrand y su relación con su biógrafo. “Anote, anótelo todo y dígales que no soy el diablo”, le dice el mandatario socialista (1981-1995, fallecido en 1996) a quien está a cargo de publicar sus memorias. Si Mitterrand como socialista paradójicamente nunca dejó de defender y perpetuar el orden burgués, Guédiguian elige problematizar el contexto de su pretérita resistencia al régimen de Vichy durante la ocupación alemana en la Segunda Guerra Mundial. Lo que queda claro en Presidente Mitterrand es el estatuto intelectual del personaje, cuya erudición está al servicio de una concepción estética de la intimidad. Finalmente, Guédiguian repite la sabiduría de El ciudadano a la hora de develar el secreto de una vida: aquí está prohibido pasar; la belleza del último plano de la película bien remite en su espíritu al inicio de la opera prima de Welles. (RK)



Miércoles 17 de mayo a las 20.30hs:
Walt Mart, el alto costo de los precios más bajos, de Robert Greenwald, EE.UU., 2005.
Sección: El ojo lúcido
93 minutos / Apta para todo público
Ciclo de cine experimental a las 19.10hs: Madre e hijo, de Alexander Sokurov, Rusia, 1997.
Este documental sobre la explotación sistematizada de la empresa Wal Mart es consistente y metódico. Greenwald como cineasta es tan rudimentario y honesto como Michael Moore, pero carece del narcisismo (y el humor) de este último. Su película permite ver cómo funciona estructuralmente el negocio del precio más bajo y su filiación ideológica, que afecta tanto a simpatizantes de la derecha como de la izquierda, como a empleados de Estados Unidos, China y Honduras (lamentablemente, el film no tiene en cuenta a las filiales argentinas, aunque no es muy difícil imaginar qué puede ocurrirle a un cajero de Wal Mart en nuestro país). No hay duda que el nuevo villano cinematográfico es la corporación como institución. La exposición de este caso abyecto y obsceno debería detener ese acto inconsciente y político de ir de compras a estos engendros concebidos para la exterminación de cualquier economía a escala humana. (RK)

Miércoles 24 de mayo a las 20.30hs:
El verano de Kikujiro, de Takeshi Kitano, Japón, 1999.
120 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Sección: Retrospectiva mínima de Takeshi Kitano
Variedades: a las 20.15hs: El día del estreno de Primer plano, de Nanni Moretti, Italia, 1996.

Este film cuyo título remite al nombre del padre del realizador es un road-movie humorístico que carece prácticamente de la violencia característica de las películas que le otorgaron prestigio al director, aunque sí retoma algunos pasajes inolvidables de Sonatine, aquellos en donde los yakuzas experimentaban una regresión a la infancia. El verano de Kikujiro circunscribe su relato al periplo de un niño acompañado por un adulto (poco adulto) en búsqueda de su madre a la que jamás conoció. Si la encuentra o no poco le importa a Kitano, pues su objetivo es otro: explorar la infancia como un estado anímico yuxtapuesto a la vida adulta. Si la primera parte del film es lineal y convencional, matizada por gags ingenuos, la segunda parte de El verano de Kikujiro es experimental y festivamente lúdica, cuyo humor circense adquiere ribetes existenciales y terapéuticos. (RK)

Miércoles 31 de mayo a las 20.30hs:
Pickpocket, de Robert Bresson, Francia, 1959.
Duración: 73 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Sección: Retrospectiva mínima de Robert Bresson.
Variedades: a las 20.15hs: Todos los chicos se llaman Patrick, de Jean Luc Godard, Francia, 1957.
“No comprender a Bresson es no entender el cine; es haber perdido aquel tren que los hermanos Lumiére filmaron llegando a la estación de Lyon hace unos 110 años atrás”. Así presentaba el crítico Jim Hoberman una reposición de Pickpocket y Mouchette en octubre del 2005 en Nueva York. Definitivamente, Bresson es puro lenguaje cinematográfico, un realizador único en la historia del cine. De los 13 largometrajes realizados en 40 años de carrera, Pickpocket es una de sus películas más accesibles y de mayor belleza. ¿Un thriller? Posiblemente no, a pesar de que el protagonista es un carterista introvertido que terminará en la cárcel. Como siempre el catolicismo del realizador ordena simbólicamente su relato, aunque el objeto de compasión y redención sea aquí un sujeto marginal de dudosa moral. Deleuze alguna vez sugirió que Bresson era el autor que había descubierto lo táctil en el cine. Pickpocket es la consumación de esa extraña aunque irrefutable tesis. (RK)

BONO CONTRIBUCIÓN: 3 PESOS

TODAS LAS PELÍCULAS SE EXHIBEN EN FORMATO DVD