CON LOS OJOS ABIERTOS

"El límite de mi mirada es el límite de mi mundo". Críticas, crónicas de festivales, programación de cineclubes y apuntes sobre cine.

lunes, julio 17, 2006

OJOS ABIERTOS EN VILLA GIARDIANO AGOSTO 2006

CINECLUB CON LOS OJOS ABIERTOS/VILLA GIARDINO
EN EL CINE TEATRO GIARDINO
PROGRAMACIÓN AGOSTO 2006


FUNCIÓN ESPECIAL DE AGOSTO 6

Domingo 6 de agosto a las 20.00hs:
Emiterio, de Diego Seppi y José Tabarelli, Argentina, 2006.
29 minutos / Apta para todo público.
*El director Diego Seppi estará presente en la función.

El premiado cortometraje documental de Diego Seppi y José Tabarelli es un ejemplo virtuoso de cómo evitar lo pintoresco y lo turístico a la hora de explorar un pueblo y una cultura periférica y lejana, en este caso característico del norte argentino. Emiterio Gutiérrez, un tejedor, además de coplero y animador (así denominan a quienes reemplazan a los curas en las misas) es el anfitrión de la mirada de los jóvenes realizadores, que en menos de 30 minutos logran capturar un estilo de vida sin adulterar su naturalidad. Estéticamente elegante y antropológicamente honesta, Emiterio, a través de un conjunto de panorámicas, planos medios y primeros planos, devela las coordenadas simbólicas y materiales de los pobladores de San Isidro, Iruya, cordillera Oriental Salteña. La copla, el tejido, el paganismo yuxtapuesto al cristianismo, las tecnologías pretéritas combinadas con tecnología de avanzada, la transmisión de saberes tradicionales no del todo integrados al sistema de educación estándar, son parte del descubrimiento de este film, cuya prolijidad formal está al servicio de una inquietud antropológica legítima. (Roger Koza, programador)

Domingo 6 de agosto a las 20.30hs:
Cándido López: los campos de batalla, de José Luis García, Argentina, 2005.
102 minutos / Apta para todo público.

“Hubo una vez en Sudamérica. Cuando los límites entre los países eran aun imprecisos. Una guerra que apenas figura en los libros de historia”. El consistente y necesario film de José Luis García materializa en imágenes lo que el historiador Tulio Halperín Donghi denomina el orden poscolonial, es decir el período histórico en donde se constituyeron los Estados-Naciones del Sur de América Latina a mediados del siglo XIX. Y el medio de reconstrucción del tiempo pretérito es la pintura de Cándido López, el artista y militar manco que a través de sus cuadros registró la sangrienta guerra contra el Paraguay perpetrada por la Triple Alianza. García parece entender su película como un viaje exploratorio, aunque más apropiado sería pensar a Cándido López como un trabajo de arqueología simbólica. En efecto, en su periplo el joven realizador espiga entre los desechos de la historia y encuentra que el pasado todavía proyecta su herencia en el presente. El imperialismo, la deuda externa, los efectos del vetusto orden poscolonial siguen vigentes, cuyo ejemplo más evidente es la proscripción del guaraní como lengua oficial del Paraguay, medida tomada tras la derrota en 1870, cuya validez caducó en 1992, más de ciento veinte años después. Si los combatientes carecen de ojos en los cuadros de Cándido López, y solo los muertos tiene el derecho a poseer un rostro y una mirada, García les presta al espectador unos lentes poderosos para escrutar la historia que poco se sabe aunque muy a menudo se repite. (RK).


Domingo 13 de agosto a las 20.00hs:
Tristram Shandy: la historia del gallo y el toro, de Michael Winterbottom, Reino Unido, 2006.
120 minutos / No recomendad para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará el pasaje titulado Primos, perteneciente a la película Cafés y cigarrillos, de Jim Jarmusch, protagonizado por Steve Coogan y Alfred Molina.

Esta adaptación cinematográfica del magistral libro acaso inadaptable La vida y las opiniones de Tristram Shandy de Laurence Sterne, ícono de la literatura anglosajona del siglo XVIII, es tan divertida e inteligente como 24 party hour people, película anterior del prolífico y versátil Michael Winterbottom. Más accesible y universal que aquel film sobre la historia de Manchester y su música de la década del 70, Tristram Shandy es más una película sobre una película que intenta adaptar un libro imposible de llevar al cine. El excelente comediante Steve Coogan es Tristram, su padre y él mismo, y su locuacidad sostiene el tono cómico y existencial que define la identidad de la película. Tras una primera media hora brillante el resto del metraje quizás no contenga ni el ritmo, ni la sagacidad de su inicio, pero el film de Winterbottom está por encima de las comedias con piloto automático que pululan en cine contemporáneo. (RK)

Domingo 20 de agosto a las 20.00hs:
Rosetta, de Jean Pierre y Luc Dardenne, Bélgica, 1999.
90 minutos / No recomendada para menores de 13 años.
Antes de la película principal se proyectará Chaplin Today: Kiarostami explica El pibe de Chaplin.
En la impecable edición de MK2, bajo la dirección de Serge Toubiana, parte de la obra esencial de Charles Chaplin ha sido restaurada y digitalizada. La archiconocida El pibe la presenta Kiarostami; el director de Ten y Five afirma que el cine de Chaplin y el suyo están dominados por una lógica de la vida y no de la imagen. Rosetta de los hermanos Dardenne es un buen ejemplo de este linaje cinematográfico. En efecto, se trata de un cine cuya lógica trasciende la mera lógica de la imagen. Los Dardenne interpelan el presente sin condescendencia alguna; sus películas son films-reelámpagos que iluminan la tristeza y la desesperación del mundo con la pretensión de alterar, por mostrar, el orden simbólico que las produce. Y a veces lo consiguen. Justicia poética y ejemplo del poder político del cine, la ley laboral para adolescentes en Bélgica se llama Ley-Rosetta. Este film cuenta la historia de una adolescente de 17 años perteneciente a la clase trabajadora que intenta trabajar para mantener a ella y a su madre, una alcohólica compulsiva. El relato se circunscribe a mostrar la cotidianidad de Rosetta dividida entre rituales de supervivencia y su rutinaria búsqueda de empleo. Diríase que los Dardenne postulan un nuevo universo laboral al que consideran una zona de guerra: conseguir un empleo es participar en un combate. Si Brecht decía que el pan viene antes de la moral, aquí la sentencia adquiere una materialidad opresiva. Tal sensación es conquistada por una construcción formal subordinada al relato. La cámara persigue a Rosetta como si esta fuera un soldado en el frente: planos secuencias, cámara en mano, nada de música extradiegética. Rosetta es el film que mejor refuta la impostura del Dogma 95 y su predecible defunción. Cuando David Cronenberg le otorgó el palmar de oro en 1999 dijo: “Elegimos lo que representa el futuro del cine”. Lo sabemos: el desempleo disciplina, provoca comportamientos vergonzosos. Véase la escena en la que Rosetta delibera sobre dejar hundir en el río-pantano a su único amigo o salvarle: ¿supervivencia o solidaridad? Rosetta apuesta a un tipo de dignidad condensada en el último pasaje de su trama, en donde ambos personajes son testigos, como nosotros, de una metamorfosis. Es el gesto que convierte a un animal moribundo como Rosetta en un agente libre que impugna toda injusticia. (RK)

Domingo 27 de agosto a las 20.00hs:
El viento nos llevará, Abbas Kiarostami, Irán, 1999.
120 minutos / Apta para todo público.
Antes de la película principal se proyectará Chaplin Today: los hermanos Dardenne explica Tiempos modernos de Chaplin.

El viento nos llevará, otra obra maestra del iraní Abbas Kiartostami, film que transcurre en una aldea de Kurdistán, consigue extraer de la singularidad de esta comunidad y su cultura una suma de tópicos universales que sirven como un espejo viviente de la humanidad. El minimalismo de su historia, un hombre -quizás ingeniero, quizás cineasta aunque también periodista- tiene que esperar un evento único y propio de esa cultura; ello está relacionado con la muerte de una anciana y su concomitante ceremonia. Mientras él y el grupo de asistentes que lo acompañan (a quienes escuchamos pero jamás vemos) esperan, Kiarostami descubre un pueblo, sus costumbres y estilos de vida. Como en otros films del realizador se puede constatar una sensibilidad ética y política reflejada habitualmente en la relación que se establece entre personajes de clase media intelectual de Teherán y gente perteneciente a la clase trabajadora, por lo general, campesinos. Aquí, el pueblo es una metáfora del mundo y su diversidad, en donde ciertos contrastes estructurales como la tensión y oposición entre lo sagrado y lo profano, lo banal y lo sublime, lo singular y lo universal encuentran una expresión directa y particular. El viento nos llevará es una extensa poesía visual acerca de la impermanencia de los objetos y los sujetos, una meditación no desprovista de humor y suspenso (el film posee el mejor gag cinematográfico sobre los teléfonos celulares, y la construcción de su trama no está muy lejos del suspenso hitchcockteano) sobre el mundo en el que vivimos, aún cuando la comunidad retratada sea un exponente del supuesto “eje del mal”. No se exagera si se afirma que el cine iraní se define por una ética y un humanismo casi extintos en otras cinematografías, cuyas bases transcienden los versos del Corán y la confusa situación política del país. (RK)

TODAS LAS PELÍCULAS SE EXHIBEN EN FORMATO DVD


1 Comments:

Blogger Carolina Araya said...

Excelente la programación de Agosto.Congratulations!

1:57 p. m.  

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